Simón Gracia

Manel y Judit lo dejaron hace tres meses, pero se citan para pasar juntos un último fin de semana de esquiada.

Marzo 2020. Los compañeros de piso marchan con sus familias y Artur se queda solo pensando que este confinamiento solo será de quince días. Al piso de al lado, vive Cèlia que está en una situación similar. En estos momentos difíciles comienzan a intimar pero siempre teniendo en cuenta que ella tiene pareja.

Las calles de Barcelona, miles de personas que coinciden a la vez, miradas cruzadas perdidas entre pensamientos. Sin darse cuenta que, aunque la suya parezca única, todo el mundo tiene una historia digna de explicar. Personas que viven el instante que los cambiará por siempre, que los definirá y las reivindicará. Momentos en nuestra vida donde hemos sido, o seremos, conscientes de un cambio de etapa; de un antes y un después. Momentos en los cuales sentimos que arrastramos en la espalda cada minuto que hemos vivido. Porqué todos estamos dentro nuestras crisálidas hasta que alguien las rompe y nos obliga a enfrentarnos en el mundo real.

Alexandra ha jugado a tenis desde que tiene memoria. Tras años entrenando bajo la tutela de su padre Julio, un tenista retirado que pretende revivir sus victorias a través de ella, se ha convertido en una de las tenistas junior más prometedoras del circuito español. Durante la celebración de uno de los torneos más importantes de la temporada de 1978, la presión creciente que ejercerá su padre dentro y fuera de la pista empezará a afectar su salud mental. Con la llegada de la adolescencia y los interrogantes que esta conlleva, Alex se dará cuenta de que, quizás, este no es su destino.