Cuando una psiquiatra forense (Julianne Moore), especializada en resolver desórdenes de personalidad múltiple, descubre que las personalidades de uno de sus antiguos pacientes corresponden a víctimas de asesinato, tratará de encontrar una explicación lógica a la conducta de ese hombre.
Eli Wurman es un experto en relaciones públicas, pero su afición a mezclar alcohol y barbitúricos hace que su mente esté siempre embotada. Además, no puede evitar la amarga sensación de haber llevado una vida absurda y superficial. Como no tiene más que un cliente, se dedica a hacer favores a viejos amigos. Durante una interminable noche, pondrá en juego su salud, su carrera y su vida social preparando un acto benéfico en favor de un grupo de refugiados africanos; por otra parte, cuando su único cliente se ve envuelto en un escándalo, se verá inmerso en un peligroso mundo de drogas ilegales, sucias maniobras políticas y sexo.