Richard Bell
En 1818, la familia Bell empieza a percibir extraños fenómenos. Al principio, son simples sonidos: pequeños ruidos inexplicables, una respiración dificultosa, pasos; pero con el tiempo la potencia de estas manifestaciones paranormales aumenta. El espíritu que las produce se vuelve agresivo y empieza a descargar su ira sobre John Bell y su hija Betsy, víctima de violentos y constantes ataques. En 1998 fue hallado un manuscrito de un maestro de escuela (que había convivido con los Bell), en el que se revelaba la causa del maleficio.