Kjetil
David vive en Oslo, tiene 25 años y pocas perspectivas de futuro. Trabaja en un gimnasio y pasa gran parte de su tiempo con pequeños delincuentes. En su casa las cosas tampoco marchan bien: su padre está gravemente enfermo, tiene un hermano con síndrome de Down y no se entiende con su madre. Todo su mundo cambiará el día en que su padre muere y él se ve obligado a traicionar a sus compañeros.