Executive Producer
George Burns está de vuelta como Dios, pero ¡ups!, aquí también está como Satanás. Una joven estrella de rock está lista para vender su alma a Satanás, y Satanás está muy feliz de complacerlo. ¡Ups! Parece que el tipo fue vigilado por Dios cuando era un bebé, por lo que ahora el todopoderoso y su némesis tienen que pelear por el alma.