Un sereno cuenta a una persona que encuentra en un café algunas de sus experiencias: la historia de un poeta al que da cobijo, la de una monja que se quita los hábitos para buscar un medicamento en el mercado negro, y la suya propia como testigo de un atraco y como enamorado.
Manuel, joven estudiante, no tiene vocación más que para el violín. Rosario, su novia, le anima en sus fases de desaliento. A la muerte de su padre y ante la falta de dinero, Manuel decide ser torero, y logra la fama, pero en una corrida es corneado y queda inútil, por lo que decide volver a la paz de su pueblo, lejos de la vida ficticia y junto a una mujer buena, Rosario.