Yoshiko Nakada

La historia gira en torno a Ryo quien al enterarse de que Yuri la mujer que amaba desaparece y al poco rato se entera de que falleció, pero antes de que ella muriera Yuri le dice que alguien exactamente igual a ella cómo quién dice un doppelganger Yuri le cuenta que puede y que su doble sea más guapa y más inteligente al final le dice que se encuentra en Hokkaido.

Katagiri, a highly ambitious young detective, teams up with older detective Takiguchi, who is about to retire, to investigate a murder that took place by Sumida River. Katagiri is annoyed by Takiguchi's pushiness, but is surprised to hear that the victim was a suspect in the 300 million yen robbery.

A foreign university student tries to fit in in Kyoto by reading books to the blind and finds himself falling in love.

Set in the Taisho era, which might be regarded as Japan's Hippie Phase, Hana no ran is a story about fashionable people without impulse control. Much of the action centers on a popular woman writer, the real-life poet Akiko Yosano, and her experiences among the literati of early 20th century Japan. Because of her independent, anti-war and often erotic poetry, she was a lightning rod for revolutionaries and other extremists, many of whom were destined to glamorous, yet ultimately pointless, deaths. The closest parallels might be the Byron/Shelley group or the people drawn to the Beat Generation.

Grandfather Fuyukichi Takano, a former university professor, gets fired from his museum job when he is affected by Alzheimer's disease, but his affliction serves to deepen family ties. Japan's submission to the 58th Academy Awards for the Academy Award for Best Foreign Language Film

Una jovencita llamada Yuki Kashima, nació en la cárcel en una fría noche como instrumento de una venganza, ya que su padre, fue brutalmente asesinado al ser confundido con un asesino del gobierno Meiji, suerte que también compartió su pequeño hermano. Su madre logró vengarse de uno de los asesinos, pero por ese asesinato fue condenada a cadena perpetua y para continuar su venganza, se dedicó a acostarse con todos los presos y carceleros que pudo, hasta conseguir quedar embarazada para que su hijo (que resultó ser hija) terminase la venganza por ella. Saya murió al dar a luz a la pequeña Yuki, que fue educada y brutalmente entrenada por el monje Dokai.