Mucho tiempo después de su curso de Erasmus en España, Xavier está casado y tiene dos hijos, pero aun así sigue encontrando la vida muy complicada. Cuando su mujer se traslada a Nueva York por razones de trabajo, incapaz de soportar la situación, decide seguirla con los niños. Tercera entrega de la saga que comenzó con "Una casa de locos" y "Las muñecas rusas".
La propietaria de un motel (Alice Eve) es raptada junto a su hija (Ursula Parker) por un criminal al borde de la ceguera (Bryan Cranston), para que sea sus ojos y tratar de recuperar el dinero de un policía corrupto (Marshall-Green).