Gibson es un joven recién llegado a la universidad que decide aprovechar el primer hueco en vacaciones para ir a visitar a un amigo en California. El motivo real de su viaje es conocer a una chica explosiva que su amigo le ha asegurado que está disponible. Durante el viaje, Gibson conoce a Alison, una chica a la que detesta desde el primer momento en que la ve pero con la que no tendrá más remedio que realizar el largo trayecto ya que ella también viaja al Oeste para encontrarse con su novio.
Jesse (Richard Gere), un impetuoso ladrón de coches con varios delitos a sus espaldas, se dirige a Las Vegas para encontrarse con Mónica (Valérie Kaprisky), una joven francesa estudiante de arquitectura de la que está enamorado. Accidentalmente, durante el camino, Jesse asesina a un policía, por lo que a partir de entonces ambos vivirán un tormentoso romance siempre acosados por la policía.
Después de varios años, el arquitecto Paul Kersey ha conseguido superar el asesinato de su mujer y llevar una vida tranquila en las afueras de Nueva York. Pero cuando su hija sea también raptada y asesinada, Paul volverá a empuñar su pistola para tomarse la justicia por cuenta propia. Secuela de la exitosa "El justiciero de la ciudad" en la que Charles Bronson interpretó por segunda vez el papel que marcaría la última etapa de su carrera. No presenta ninguna novedad con respecto al título precedente (el director vuelve a ser el eficaz Michael Winner), excepto la presencia de Jill Ireland, esposa de Bronson en la vida real e inevitable en la mayoría de sus películas, hasta su muerte a causa de un cáncer de pecho.
Leigh Michaels es la flamante directora de noticas de una cadena de televisión neoyorquina que acepta el traslado a Los Ángeles para poner tierra de por medio en un asunto del corazón, pero ni su privilegiada posición ni sus encantos hacen mella en la policía cuando denuncia el acoso al que está siendo sometida. Lee recibe llamadas telefónicas de un misterioso individuo que vive en el apartamento frente al de ella.
Una extraña ola de crímenes está teniendo lugar en Nueva York. Un extraño personaje controla las mentes de personas anónimas y respetables obligándolas a comportarse como vulgares criminales. Peter Parker es un joven estudiante a punto de doctorarse, por accidente una araña radioactiva le muerde en la mano y le dota de una fuerza y agilidad sobrehumana además de la capacidad de trepar por las paredes. La hija de uno de los detenidos por los robos, Judy Tyler, entra en la vida de Peter cuando este está sacando fotos para el periódico donde trabaja. Al ver que la gente a su alrededor e incluso toda la ciudad está en peligro, decide crearse un disfraz para detener al villano evitando un chantaje de millones de dólares. Gracias a sus recién adquiridos poderes podrá plantar cara a tan peligrosa amenaza.
Cuando el detective Lou Torrey es trasladado a Los Angeles, descubre que un mafioso siciliano contrata a veteranos del Vietnam para asesinar a todos sus enemigos.
