Brandon Walker

Películas

Hunger Point
Supervising Sound Editor
A woman struggles with her self-image in a house run by a weight-obsessed mother, alongside a younger sister whose eating disorder has tragic coincidences.
Cube 2: Hypercube
ADR Editor
Ocho personas despiertan encerradas en una extraña habitación con forma de cubo sin saber cómo llegaron hasta ahí. Pronto descubren que las leyes de la física no se aplican en ese extraño mundo, así que tendrán que descubrir los secretos del cubo para poder sobrevivir.
Mi hermano el cerdito
Supervising Sound Editor
George es un niño de nueve años que aprovecha la ausencia de sus padres durante unas vacaciones para hacer todo tipo de travesuras a su hermana Kathy y a la joven que les hace de canguro, Matilda. Un día encuentra un conjuro mágico en un libro de la niñera, lo hace y queda convertido en un pequeño cerdito.
La última vez que me suicidé
ADR Recordist
Relato de las peripecias de un grupo de amigos que aun hoy son conocidos como la generación "beat", unos jóvenes inconformistas que renunciaron a todo lo establecido, el consumismo y los convencionalismos, creando un nuevo estilo de vida. Una generación venerada por su excentricidad y su obra literaria, que buscaba la perfección a través del sexo, las drogas, el zen y otros métodos socialmente "incorrectos". La película refleja la vida de Neal Cassady, el ídolo "beat" por excelencia, y las aventuras que hicieron de él una leyenda.
Barb Wire
ADR Recordist
Barb Wire es cortante como un cuchillo y fría como el hielo, pura dinamita. No se anda con tonterías y nunca toma partido. Vive en un futuro no muy lejano, en un país devastado por la guerra civil. Es una mujer con valores en un mundo carente de esperanza. Todos la desean. Pero nadie puede conseguirla. No pierde el tiempo con hombres que no tengan un buen cerebro. Hace ya mucho tiempo que Barb Wire sólo se ayuda a sí misma. Pero cuando quiere puede hacer mucho más que cualquier hombre. No hay problema al que no pueda enfrentarse. Puedes darle una paliza, atacarla con un cuchillo, dispararla o arrastrarla por el suelo. Pero hagas lo que hagas nunca le llames "muñeca".