Una joven, que llega a Reno (Nevada) para divorciarse, conoce a un viejo vaquero y decide quedarse unos días en su cabaña. Poco después él descubre en las montañas una manada de caballos salvajes. Con la colaboración de un vaquero especialista en rodeos, decide capturarlos para vender la carne.
Pete es un saxofonista que llega a Nueva York para ganarse la vida. Allí conoce a una bailarina que necesita un sitio donde dormir. Él propone compartir un piso que dividen con una cortina.
Scottie Fergusson es un detective de la policía de San Francisco que padece de vértigo. Cuando un compañero cae al vacío desde una cornisa mientras persiguen a un delincuente, Scottie decide retirarse. Gavin Elster, un viejo amigo del colegio, lo contrata para que vigile a su esposa Madeleine, una bella mujer que está obsesionada con su pasado.
Durante un hermoso día de otoño, en un idílico rincón campestre de Vermont, se oyen tres disparos, y aparece un cadáver, el de Harry. Un viejo capitán (Edmund Gwenn) que cree que se trata de un accidente de caza del que se siente responsable, entierra, desentierra y transporta varias veces el cadáver sobre cuya identidad se interrogan con perplejidad una solterona, un médico miope y un pintor abstracto (John Forsythe).