C. G. Agent
El pequeño pueblo asturiano de Cenciella, España, a principios del siglo XX. La tranquila vida de Urbano y Estrella, una pareja de enamorados amable e ingenua, se ve gravemente alterada cuando se ven envueltos en la lucha encarnizada que mantienen las facciones políticas locales: los chorizos —el partido democrático— y los becerriles —el partido de los caciques—.
Esta película no tiene argumento. Es más bien un aguafuerte o, quizá, uno de aquellos retratos al minuto que hacían los pintores sin talento en las calles de Madrid en torno a 1950. La capital era entonces más que nunca el rompeolas de España. Un rompeolas gris, de cartillas de racionamiento, tierno y cruel a la vez, pobre hasta en sus alegrías, convaleciente (siempre con décimas al atardecer), pero también pícaro, festivo y surrealista. Un tiovivo, en fin, de supervivientes de los que, nos guste o no, somos herederos.
Soldado #3
Por una extraña coincidencia del destino, alguien recibe una información extraconfidencial de un anciano en sus últimos segundos de vida que resulta ser uno de los secretos mejor guardados de la Historia: el paradero del Oro de Moscú. El receptor, Iñigo, un trabajador de hospital, se lo comunica secretamente a un supuesto amigo, Pedro "Papeles" Aparicio, quien trabaja en El País. Ambos inician una aventura rocambolesca y llena de misterio en la que tienen que recurrir a otras personas que así mismo van cayendo en el pozo sin fondo que conlleva descifrar el enigma.