El Marqués de Coustine, un diplomático francés del siglo XVIII con una relación de amor/odio hacia Rusia se encuentra en un viaje en el tiempo en el Palacio de Invierno de San Petersburgo -desde los tiempos de Pedro el Grande hasta nuestros días. Con él, un invisible realizador ruso (en off), que está confuso sobre la posición de Rusia en Europa.
Un profesor de música que ha perdido su trabajo se tiene que mudar a una habitación en un modesto edificio, cuyo último ocupante fue una anciana muerta hace más de un año. Esxtrañamente, encuentra a su gato encerrado en el armario, perfectamente sano y bien alimentado. Pronto se descubrirá el por qué del misterio, en esa habitación hay una ventana que comunica directamente la fría y empobrecida capital rusa nada más y nada menos que con París.