Peter Handke adaptó su propia novela para este film sobre un portero de fútbol que pierde súbitamente la concentración en medio de un partido y es expulsado del juego. Confundido, vaga por la ciudad sin saber dónde ir y termina realizando acciones sin mucha explicación ni sentido.
En la población de Salem durante el siglo XVII, en un ambiente de exacerbado puritanismo, una mujer mantiene relaciones adúlteras y queda embarazada. La comunidad intenta obligarla a revelar la identidad del padre y al negarse, es obligada a llevar una insignia acusatoria.
A Franz (Fassbinder), un chulo de poca monta cuya novia es una prostituta (Hanna Schygulla), se le plantea un problema. Acostumbrado a "trabajar" por cuenta y riesgo propios, un sindicato de gánsteres le pide que actúe para ellos, pero él se niega a ingresar en la organización criminal. Ésta lo hace vigilar por un confidente para doblegar su voluntad. Mientras la organización lo tiene secuestrado, entre él y el espía Bruno (Ulli Lommel) surge espontáneamente una relación de amistad. Franz se siente fascinado por la belleza angelical de Bruno...